Y fuiste mi dueño una última noche. Y te sentí cerca... Aunque... Aunque al estar nuestros cuerpos unidos como uno, estabas a kilómentros de distancia.
Porque tu corazón estaba lejos del mío. Y el mío lloró.
Viste mis lágrimas, lágrimas que fueron puro amor, porque realmente fue así.
Y para qué? Si no lo ves.
No te bastó el tiempo que estuvimos juntos para verme, no te bastará ahora.
No te obligo a sentirlo, ni verme, ni nada. Ya no. Te obligo a que intentes no hacerme daño.
Te amo.
Y no quiero más lastimarme por eso.Muchas veces lo dije, muchas veces dije que no quería verte nunca más.
Pero nunca estuve tan decidida como ahora.
Sabés por qué? Porque ayer me di cuenta que ya no hay solución, que no hay remedio.
Que por más que siga intentando, siga peleando y luchando por lo que fielemente siento.
No alcanza. No puedo sola.
Te necesito.
Y no estás.
No hay comentarios:
Publicar un comentario